Un gran equipo prospera con las victorias, pero en la historia reciente de Santos se ha vuelto raro tener una secuencia de resultados positivos. Desde mayo de 2022, el equipo no ha podido sumar tres triunfos consecutivos, por ejemplo. Este martes, los hombres de Odair Hellmann intentarán dar un paso más en el proceso de reconstrucción y buscarán repetir la hazaña de 11 meses en una visita a Botafogo, en Ribeirão Preto, a partir de las 19 horas, para la apertura de la tercera fase de la FIFA. Copa del Mundo Brasil.
Tras una temprana caída en el estado, Santos superó sin temores a Iguatu en la ronda previa de la Copa do Brasil y debutó con un contundente 1-0 en casa de Bolívar por la Copa Sudamericana. Dos resultados celebrados por Odair Hellmann, que cree en el ímpetu del equipo en la búsqueda de confianza para la segunda parte.
Botafogo estaba en el grupo de Santos en el Estado y terminó en el segundo lugar del grupo, encabezado por Red Bull Bragantino. Además de haberlo ganado en el Estado, el equipo de Ribeirão Preto ha sido una espina clavada. En los últimos seis partidos entre ambos, Santos ganó una sola vez, con tres empates y dos derrotas.
En 2022, el Botafogo marcó el 1-0 en Vila Belmiro y en el último encuentro en Ribeirão Preto, escenario del partido de este martes, el Santos se impuso por un humillante 4-0, para evitar una presión extra e innecesaria en casa.
«Marcar fuera de casa siempre es importante, conseguir los tres puntos, más aún. La victoria (en Bolivia) fue importante para la reanudación del trabajo y para dar confianza al grupo», destaca Odair Hellmann, confiado en que tendrá un Equipo más ligero y sin tanta presión este martes. “Tenemos que buscar la evolución”, dice.
En relación al equipo utilizado en Bolivia, Odair Hellmann solo debe hacer un cambio, con el ingreso de Rodrigo Fernández (quien cumplió su suspensión en la Copa Sudamericana) en el lugar de Ivonei.
Contratado a fines de febrero en reemplazo de Paulo Baier, el técnico Adilson Batista tuvo tiempo de sobra para armar al Botafogo para la Copa do Brasil y definió cómo quiere que su equipo se comporte este martes: manejando la posesión del balón y siendo agresivo para buscar ventaja en sus dominios .
La duda del técnico está en el centro del campo, entre Guilherme Madruga, que marcó uno de los tres goles en el partido de entrenamiento ante Francana (3-1) o el centrocampista Tárik, que también ha estado ejerciendo de defensa. “Ya me puse disponible para cualquier puesto y depende de Adilson decidir.
El experimentado jugador sigue viendo más fuerte al equipo con el cambio de mando. “Desde que llegó Adilson tenemos un equipo más agresivo, que está más con el balón y esas son las características que vamos a mostrar. Hay que hacer que cuente el factor casa, con nuestra afición. Son dos partidos, pero intentaremos marcar primero en casa y luego pensar en el partido en el Vila».