O El Telescopio Espacial James Webb realizó una nueva observación de un cometa y confirmó la presencia de vapor de agua alrededor de este cuerpo celeste, el cometa 238P/Read, procedente del cinturón de asteroides de nuestro Sistema Solar.
Los científicos y astrónomos solían creer que los cometas podían contener agua tan cerca del Sol, pero este reciente descubrimiento ha proporcionado evidencia concreta.
Sin embargo, estas observaciones trajeron un nuevo misterio a la comunidad científica, ya que no encontraron evidencias de dióxido de carbono, que normalmente representa el 10% del material vaporizado de un cometa. Los investigadores creen que el dióxido de carbono puede haberse disipado durante miles de millones de años, incluso especulando que el cometa 238P/Read puede haberse formado en una región del Sistema Solar sin dióxido de carbono.
Naturalmente, este misterio solo aumentó la curiosidad de la comunidad científica, que seguramente llevará a cabo más observaciones.
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