sÃOO PAULO, SP (FOLHAPRESS) – El colectivo de arte KKKK pirateó los enlaces de código QR de una exposición en el Kunsthaus de Zúrich, Suiza, que albergaba una colección de Emil Georg Bührle, a quien el colectivo describe como un simpatizante nazi y un posible criminal de guerra.
El Kunsthaus, un edificio diseñado por el arquitecto británico David Chipperfield, exhibe 170 obras impresionistas prestadas por la Fundación Bührle, que lleva el nombre del industrial suizo que hizo una fortuna vendiendo armas a la Alemania nazi y compró obras de arte saqueadas por el régimen autoritario.
El colectivo KKKK reclama en su sitio web que la colección Bührle es producto de persecución, expropiación y asesinato y exige la restitución inmediata de obras que directa o indirectamente fueron robadas a judíos, así como la venta de las piezas restantes en beneficio del Holocausto. sobrevivientes, sus descendientes y los descendientes de los trabajadores esclavizados por los nazis.
Bührle fue miembro de la junta directiva de Kunsthaus en 1940 y ya había contribuido financieramente a la institución incluso antes de eso. A pesar de la larga relación, los críticos argumentan que la institución nunca debería haber aceptado el préstamo de la colección de procedencia lúgubre.
La fundación argumenta que ninguna de las obras que se exhiben en la colección se logró a través de la persecución nazi, pero hay al menos un caso en disputa. La fundación rechazó un reclamo por el «Campo de amapolas cerca de Vétheuil» de Claude Monet (1879).
La nueva directora de la Kunsthaus, Ann Demeester, que asumió el cargo en enero de este año, se ha comprometido a investigar la cuestión del legado de Bührle. El caso también es evaluado por una comisión independiente de la ciudad de Zúrich. La muestra con la colección del empresario será sustituida por una nueva en noviembre.
Demeester señaló que la nueva exposición traerá temas que dialogan con esta polémica y que contactó al colectivo responsable de la invasión de códigos QR.
«Esperamos participar en debates cuando se inaugure. Estamos trabajando con un equipo pluralista y una junta de expertos externos en esta exhibición. Nos comunicamos con el KKKK para iniciar una conversación por adelantado».