La caravanista Josélia Bandeira acusa al asesor de Alexandre Frota, Eduardo Rocha, Dudu, de incumplimiento de los servicios prestados. Hace dos semanas, Rocha contrató a la caravanista y a otras 30 chicas como extra. La obra sería realizada durante la presencia VIP de Frota en un bar de Tatuapé, un barrio del este de São Paulo. El monto acordado entre las dos partes ronda los R$ 900,00.
Según lo informado, las niñas llegaron a las 15:00 horas y permanecieron en el lugar hasta las 21:00 horas, sin refrigerio ni asistencia. Frota y Rocha llegaron alrededor de las 10 de la noche, pero los despidieron incluso antes de que comenzara el evento, sin pago alguno. El conductor de la camioneta fue el único que lo recibió, aún después de amenazas.
El otro lado
Se busca, cuenta Rocha otra versión. Dice que solo indicó a la caravanista y que el compromiso de pagarla sería responsabilidad de la promotora, encargada de organizar el evento. Pero aun así, cuando vio la denuncia de Josélia, pagó de su propio bolsillo cerca del 50% del monto.
«Es triste. Quieres ayudar a la persona y terminas con una reputación de holgazán», desahoga el asesor, con la voz alterada.
Tanto Josélia como Rocha aseguran que Alexandre Frota no tiene nada que ver con la situación.